ÚLTIMA LLAMADA PARA LA MERCURY RX STATION

La hora había llegado. Se había pasado toda la semana comiendo chocolates para llenarse de endorfinas (porque de algo tenía que llenarse), y aceptar el hecho de que cuando Mercurio Retrógrado empezara, su relación a distancia iba a enfrentar un tsunami de emociones y malos entendidos para los que no estaba completamente preparada. ¿No era suficiente su tránsito de Plutón, haciéndola enfrentar una nueva montaña para escalar, cada 5días? No, ahora Mercurio tenía que retroceder y hacerla perder la entrevista mas importante de su carrera porque se quedó dormida, ganar una semana mas de estrés porque el mecánico AÚN tiene su auto secuestrado, traer de vuelta ese dolor de muelas que no sentía desde que tenía 15 años, y cambiarle de arrendandor, justo cuando había logrado volverse amiga del anterior. Pero si Mercurio se atrevía a meterse con su relación, ya no sabía que iba a hacer. Si no fuera porque su ex novio que ahora era profesor de yoga (si, hubo un tiempo en el que salía con chicos, pero sólo chicos Piscis, porque eran sensibles y la escuchaban), regresó milagrosamente a trabajar a la ciudad y a recordarle que la vida era como el mar (con dias de marea alta y otros de brutal serenidad) no habría llegado cuerda al fin de semana. Talvez era el hecho de que Mercurio iba a retroceder primero en su signo, y sabia que la nostalgia iba a distraerla de mirar para adelante, hacia dias aun no existentes donde no hubiera teléfonos, ni pantallas, ni las cartas que aún le gustaba enviar porque bueno, lo vintage es lo más romántico, y la iba a llenar de dudas. Pero al levantar el teléfono se puso a pensar en algo que leyó en un blog, acerca de recuperar lo que la hacía feliz de niña (y según había leído también, las mujeres Cáncer siempre serán mitad madres, y mitad niñas), y las acuarelas con las que pintaba cuando aún no había internet en su vida (allá por 1997) llegaron a su mente incluso en olor y forma. Una sonrisa de media luna atrapó sus lágrimas, y se vió a si misma pintando otra vez, vendiendo sus cuadros como en la universidad, y reencontrándose con viejos maestros. Talvez Mercurio Retrógrado no era tan malo, si iba a despertar algo que estaba dormido. Fue a contestar la llamada de su novia, aún pensando en traer esos días de paz a su caótica adultez, cuando recordó con una mezcla de incredulidad y terror, que había enviado la caja de Cupcakes que tanto le había costado envolver, a Cartagena-España, cuando su novia estaba (claramente) en Cartagena-Colombia. 

Feliz (¿?) Mercurio Retrógrado everybody, vienen varios post sobre el tránsito favorito (¿?) de todos. Hay un adelanto en los Horóscopos acá.